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Misrra Capítulo 6: Vivimos para explorar
18.02.15 15:31
!Hola a todos! Un nuevo capítulo del alucinante mundo de Misrra ¿Qué será lo que les depara a nuestros amigos Javier y Forto en esta expedición por las afueras de Misrra? (Ha quedado una intro épica jajajaja)
Este capítulo ya ha sido corregido.
Capítulo 6: Vivimos para explorar
Capítulo 6: Vivimos para explorar
El silencio de la montaña se adueñaba del lugar mientras Forto y Javier esperaban sentados bajo aquel roble. Los dos miraban hacia abajo, quizá se habían dado cuenta de la estupidez que acababan de cometer. O simplemente estaban concentrándose por lo que estaban a punto de hacer, o más bien por lo que ya habían hecho. Javier se hizo una coleta en el pelo y se levantó clavando la espada en el césped para apoyarse en ella. Miró hacia las lejanas murallas de Misrra y preguntó en voz alta.
¿Crees que alguien saldrá a buscarnos?
Lo dudo. – Respondió Forto de forma inmediata.
¿Tan insignificantes somos?
Supongo que no somos insignificantes pero tampoco significamos lo suficiente. Aun que pensándolo bien quizá el comandante sí que sale a buscarte.
En cualquier caso creo que deberíamos empezar a explorar ya por si acaso saliesen a buscarnos ¿No?
Supongo que sí. – Dijo mientras hacía el esfuerzo de levantarse del suelo.
Vale ¿Me sigues?
Dale.
Estaban a trescientos metros de la muralla y a penas a cincuenta del bosque que algunos denominan el bosque de la noche. Desde la muralla, cuando miras el bosque por la noche se ven las hermosas luces que los exploradores han ido poniendo al largo de la historia para ver mejor al enemigo desde una posición segura. Así que los “pequeños” soldados solo tenían que seguir las luces aun que no se veían con claridad porque era de día. Sin embargo, al llegar a la última luz que pusieron dichos exploradores daba incluso miedo adentrarse en el bosque ya que no sea veía a penas nada a partir de ahí. Rápidamente los soldados supusieron que los exploradores todavía no se adentraron en lo más profundo del bosque de la noche por miedo a lo que se podían encontrar. Algo que ellos dos tenían pero, no sentían.
Saca la linterna Javier es hora de explorar lo inexplorado.
¿A lo largo de toda la historia nadie ha entrado aquí?
Según los apuntes de clase no. Donde se acaban las luces se acaba la exploración.
Sinceramente no lo creo. No tiene sentido, alguien, alguien debe haber sido tan curioso como nosotros ¿No?
Seguramente sí pero quizá no volvió para contarlo ¡jajajajaja!
Ja…Ja… Ja… Ja… Ni puta gracia Forto.
Lo siento… solo quería relajar el ambiente estaba demasiado tenso.
¡Jajajajaja! Tranquilo solo bromeaba me ha hecho gracia tu tontería. Aun que quizá sea verdad.
Quizá sí.
Después de una broma pesada por parte de Forto Javier sacó su linterna de carbón y la encendió. Con la mano izquierda sujetaba la linterna y con la derecha la espada de acero oscuro. Al fondo del bosque se veía todo muy oscuro pero, había una zona que todavía se veía más oscura. Parecía tener forma humana pero con un tamaño colosal. Los soldados se miraron y asintieron con la cabeza simultáneamente, tragaron saliva y siguieron acercándose hacia aquella extraña forma. Poco a poco todo se veía más claro, estaba allí, medía unos cuatro metros de altura y estaba apoyado en un inmenso pino.
¡Shhh! No hagas ruido Forto, está durmiendo, es el momento de acabar con él.
¿Estás loco? Ya lo hemos visto de cerca, marchémonos.
No he llegado hasta aquí para nada Forto. Si quieres vete, es la única oportunidad que tenemos. ¡Ahora o nunca!
¡Mierda!
Mierda ¿Qué?
Forto comenzó a correr hacia atrás lo más rápido que podía cuando vio que el cíclope se levantaba a las espaldas de Javier quien miró hacia atrás y vio al monstro cara a cara. Tenía el ojo rojo y no tenía boca, justo como había estudiado, era una especie que no se alimenta por la boca y que no sabían por donde se alimentaba. El soldado Javier se quedó quieto observando al cíclope mientras este se acercaba a una velocidad no muy rápida. Miró hacia atrás y vio a Forto parado gritando: ¡Corre Javier Corre!
Huye si quieres, no te será difícil pero huye ahora para que no te siga hasta la muralla.
No puedo dejarte atrás ¿Está bien, qué hacemos?
Ven donde yo y quédate quieto, cuando esté lo suficientemente cerca nos dividiremos uno para cada banda, solo tiene un ojo, asusta, pero es una desventaja ya que no ve con claridad y tampoco tiene el mismo sentido de la profundidad que nosotros. Así que si nos acercamos mucho pero sin tocarlo no nos detectará, pensará que estamos más alejados o bien más lejos.
Dios mío…
¿Confías mi?
¡Claro que no! Pero no tengo un plan “b”
¡Jajajajaja! – Javier se reía de forma que le servía para dejar escapar sus nervios.
Cuando el gigante llegó a ellos, Javier se fue hacia la derecha y Forto hacia la izquierda sin tocar al cíclope de ninguna manera. Éste intentó agarrarlos pero no lo consiguió, mientras e gigante giraba ellos ya habían comenzado a correr hacia delante y se escondieron detrás de un inmenso pino.
¡Wow! Tenías razón.
Aha…
Es por eso que siempre que se les ataca se acaba muerto, porque nos detectan con el tacto de nuestras espadas.
Eso es.
Es un gran descubrimiento, burlemos de nuevo al Cíclope y volvamos.
Hagámoslo.
Se acercaron al cíclope corriendo como locos pero haciendo el mínimo ruido posible para que ninguno de sus sentidos pudiese darle ninguna facilidad para detectarles. Al llegar a sus piernas, pasaron por debajo de ellas y siguieron corriendo cuatrocientos metros hasta la muralla. Al llegar, Forto dijo:
¡Genial! ¿Ahora como entramos?
Grita, los arqueros no nos ven pero quizá nos escuchen ¿no es así?
Tienes razón: ¡AAAAAAAAAAAAAAAAAHHHHHHH!
Buen grito Forto jajajajaja.
Desde la puerta se escuchaba el ruido de los guardias decir:
¿Sois vosotros chicos?
¡Sí! – Respondieron los dos a la vez.
Os sigue algún cíclope ¿Verdad?
¡No! Pueden comprobarlo los arqueros.
¡Pasad!
Abrieron las compuertas y Forto entró corriendo dentro de de la zona Misrriana, n obstante, miro a su lado y Javier no se encontraba junto a él ni tampoco a la vista fuera de la muralla.
¡Javier! ¡Javier! ¡Entra!
Tenemos que cerrar las puertas soldado, debemos hacerlo ya.
Javier sigue fuera no podéis dejarlo ahí.
No hay nadie soldado. ¡Cierren compuertas!
¡No, no, no, no, no nooooooooo! Déjenme salir a por él. – Dijo mientras las puertas se cerraban.
Soldado, me temo que no va a poder ser, agárrenlo.
Los demás guardias agarraron a Forto por los brazos quien con mucha rabia intentaba deshacerse de ellos pero era imposible, no podía hacer nada…
Este capítulo ya ha sido corregido.
Capítulo 6: Vivimos para explorar
Capítulo 6: Vivimos para explorar
El silencio de la montaña se adueñaba del lugar mientras Forto y Javier esperaban sentados bajo aquel roble. Los dos miraban hacia abajo, quizá se habían dado cuenta de la estupidez que acababan de cometer. O simplemente estaban concentrándose por lo que estaban a punto de hacer, o más bien por lo que ya habían hecho. Javier se hizo una coleta en el pelo y se levantó clavando la espada en el césped para apoyarse en ella. Miró hacia las lejanas murallas de Misrra y preguntó en voz alta.
¿Crees que alguien saldrá a buscarnos?
Lo dudo. – Respondió Forto de forma inmediata.
¿Tan insignificantes somos?
Supongo que no somos insignificantes pero tampoco significamos lo suficiente. Aun que pensándolo bien quizá el comandante sí que sale a buscarte.
En cualquier caso creo que deberíamos empezar a explorar ya por si acaso saliesen a buscarnos ¿No?
Supongo que sí. – Dijo mientras hacía el esfuerzo de levantarse del suelo.
Vale ¿Me sigues?
Dale.
Estaban a trescientos metros de la muralla y a penas a cincuenta del bosque que algunos denominan el bosque de la noche. Desde la muralla, cuando miras el bosque por la noche se ven las hermosas luces que los exploradores han ido poniendo al largo de la historia para ver mejor al enemigo desde una posición segura. Así que los “pequeños” soldados solo tenían que seguir las luces aun que no se veían con claridad porque era de día. Sin embargo, al llegar a la última luz que pusieron dichos exploradores daba incluso miedo adentrarse en el bosque ya que no sea veía a penas nada a partir de ahí. Rápidamente los soldados supusieron que los exploradores todavía no se adentraron en lo más profundo del bosque de la noche por miedo a lo que se podían encontrar. Algo que ellos dos tenían pero, no sentían.
Saca la linterna Javier es hora de explorar lo inexplorado.
¿A lo largo de toda la historia nadie ha entrado aquí?
Según los apuntes de clase no. Donde se acaban las luces se acaba la exploración.
Sinceramente no lo creo. No tiene sentido, alguien, alguien debe haber sido tan curioso como nosotros ¿No?
Seguramente sí pero quizá no volvió para contarlo ¡jajajajaja!
Ja…Ja… Ja… Ja… Ni puta gracia Forto.
Lo siento… solo quería relajar el ambiente estaba demasiado tenso.
¡Jajajajaja! Tranquilo solo bromeaba me ha hecho gracia tu tontería. Aun que quizá sea verdad.
Quizá sí.
Después de una broma pesada por parte de Forto Javier sacó su linterna de carbón y la encendió. Con la mano izquierda sujetaba la linterna y con la derecha la espada de acero oscuro. Al fondo del bosque se veía todo muy oscuro pero, había una zona que todavía se veía más oscura. Parecía tener forma humana pero con un tamaño colosal. Los soldados se miraron y asintieron con la cabeza simultáneamente, tragaron saliva y siguieron acercándose hacia aquella extraña forma. Poco a poco todo se veía más claro, estaba allí, medía unos cuatro metros de altura y estaba apoyado en un inmenso pino.
¡Shhh! No hagas ruido Forto, está durmiendo, es el momento de acabar con él.
¿Estás loco? Ya lo hemos visto de cerca, marchémonos.
No he llegado hasta aquí para nada Forto. Si quieres vete, es la única oportunidad que tenemos. ¡Ahora o nunca!
¡Mierda!
Mierda ¿Qué?
Forto comenzó a correr hacia atrás lo más rápido que podía cuando vio que el cíclope se levantaba a las espaldas de Javier quien miró hacia atrás y vio al monstro cara a cara. Tenía el ojo rojo y no tenía boca, justo como había estudiado, era una especie que no se alimenta por la boca y que no sabían por donde se alimentaba. El soldado Javier se quedó quieto observando al cíclope mientras este se acercaba a una velocidad no muy rápida. Miró hacia atrás y vio a Forto parado gritando: ¡Corre Javier Corre!
Huye si quieres, no te será difícil pero huye ahora para que no te siga hasta la muralla.
No puedo dejarte atrás ¿Está bien, qué hacemos?
Ven donde yo y quédate quieto, cuando esté lo suficientemente cerca nos dividiremos uno para cada banda, solo tiene un ojo, asusta, pero es una desventaja ya que no ve con claridad y tampoco tiene el mismo sentido de la profundidad que nosotros. Así que si nos acercamos mucho pero sin tocarlo no nos detectará, pensará que estamos más alejados o bien más lejos.
Dios mío…
¿Confías mi?
¡Claro que no! Pero no tengo un plan “b”
¡Jajajajaja! – Javier se reía de forma que le servía para dejar escapar sus nervios.
Cuando el gigante llegó a ellos, Javier se fue hacia la derecha y Forto hacia la izquierda sin tocar al cíclope de ninguna manera. Éste intentó agarrarlos pero no lo consiguió, mientras e gigante giraba ellos ya habían comenzado a correr hacia delante y se escondieron detrás de un inmenso pino.
¡Wow! Tenías razón.
Aha…
Es por eso que siempre que se les ataca se acaba muerto, porque nos detectan con el tacto de nuestras espadas.
Eso es.
Es un gran descubrimiento, burlemos de nuevo al Cíclope y volvamos.
Hagámoslo.
Se acercaron al cíclope corriendo como locos pero haciendo el mínimo ruido posible para que ninguno de sus sentidos pudiese darle ninguna facilidad para detectarles. Al llegar a sus piernas, pasaron por debajo de ellas y siguieron corriendo cuatrocientos metros hasta la muralla. Al llegar, Forto dijo:
¡Genial! ¿Ahora como entramos?
Grita, los arqueros no nos ven pero quizá nos escuchen ¿no es así?
Tienes razón: ¡AAAAAAAAAAAAAAAAAHHHHHHH!
Buen grito Forto jajajajaja.
Desde la puerta se escuchaba el ruido de los guardias decir:
¿Sois vosotros chicos?
¡Sí! – Respondieron los dos a la vez.
Os sigue algún cíclope ¿Verdad?
¡No! Pueden comprobarlo los arqueros.
¡Pasad!
Abrieron las compuertas y Forto entró corriendo dentro de de la zona Misrriana, n obstante, miro a su lado y Javier no se encontraba junto a él ni tampoco a la vista fuera de la muralla.
¡Javier! ¡Javier! ¡Entra!
Tenemos que cerrar las puertas soldado, debemos hacerlo ya.
Javier sigue fuera no podéis dejarlo ahí.
No hay nadie soldado. ¡Cierren compuertas!
¡No, no, no, no, no nooooooooo! Déjenme salir a por él. – Dijo mientras las puertas se cerraban.
Soldado, me temo que no va a poder ser, agárrenlo.
Los demás guardias agarraron a Forto por los brazos quien con mucha rabia intentaba deshacerse de ellos pero era imposible, no podía hacer nada…
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Re: Misrra Capítulo 6: Vivimos para explorar
18.02.15 22:31
oooohhh!!!!! me encanto este capitulo jajajaja que cruel de parte de Javier por que pienso que por lo que hizo le ira mal a Forto u.u. Pero eso lo veré después jajajaja
- InvitadoInvitado
Re: Misrra Capítulo 6: Vivimos para explorar
19.02.15 3:02
Nose si se ha interpretado mal o que no he savido plasmar en el papel la oracion: me temo que no va a poder ser soldado,a agarrenlo. Esto lo dice el guardia refiriendose a que no va a poder ser lo de abrir las puertas voy a cambiar la frase a: soldado, me temo que no va a podr ser. Supongo que se entendera mas bien jejeje.
- InvitadoInvitado
Re: Misrra Capítulo 6: Vivimos para explorar
19.02.15 3:03
Es decir el guardia no ha dicho nada rederente a que vayan hechar del cuerpo a Forto. Pero aun asi ya veremos que pasa con el.
- InvitadoInvitado
Re: Misrra Capítulo 6: Vivimos para explorar
19.02.15 14:11
ajajajaja no lo dije por eso jajajaj son mis intuiciones jajaja *has de saber que son malas la mayor parte del tiempo * pero son mis intuiciones jajajajaj
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Re: Misrra Capítulo 6: Vivimos para explorar
19.02.15 15:25
Aaaa jajajaja vale si es asi jejeje. Igualmente se podia mal interpretar
- InvitadoInvitado
Re: Misrra Capítulo 6: Vivimos para explorar
21.02.15 0:20
jajajaja bueno esta bien solo lo aclaraba por si lo hacias en caso de creer que lo entendi asi ajaajajjaja pero esta bien espero leer el proximo capitulo
- InvitadoInvitado
Re: Misrra Capítulo 6: Vivimos para explorar
21.02.15 6:33
Madai ya he acabado el siguiente episodio, un episodio en el que se descubre algo bastante importante y espero que te guste. No he podido traerlo antes por que tenía que pensar bien el futuro de estos personajes además de que he tenido algún que otro problema. No obstante aquí está y creo que ha quedado bastante bien. !A ver que te parece! Como siempre lo publico en otro post.
- InvitadoInvitado
Re: Misrra Capítulo 6: Vivimos para explorar
21.02.15 9:22
No se si llega una notificación por tal de editar un escrito, sin embargo he editado este capítulo y he puesto algunas correcciones, no es necesario volver a leerlo para nada, son simples correcciones gramaticales, comas, expresiones mal hechas. Bla Bla Bla.
Voy a ir editando todos los capítulos con dichas correcciones para que los nuevos lectores que comiencen a leer la historia, si es que hay alguno, no encuentren este tipo de errores que hacen la lectura un tanto más pesada.
Gracias. Atentamente ErosRa
Voy a ir editando todos los capítulos con dichas correcciones para que los nuevos lectores que comiencen a leer la historia, si es que hay alguno, no encuentren este tipo de errores que hacen la lectura un tanto más pesada.
Gracias. Atentamente ErosRa
- InvitadoInvitado
Re: Misrra Capítulo 6: Vivimos para explorar
21.02.15 10:04
jajajjaja Siiiii ya lo lei y me has dejado sorprendida D= y no te preocupes ejejejeje por cierto espero que estes bien y el problema superado. Bonito diaaa!!
- InvitadoInvitado
Re: Misrra Capítulo 6: Vivimos para explorar
21.02.15 11:08
Jejejeje muchas graciasss
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