¿Cómo te despides de la persona que amas?

Cuando esto empezó te dije que era una locura, que no estoy bien de la cabeza y que ni yo misma me entiendo; tu tan solo sonreías y me decías que era perfecta así, aun cuando sabias que no era así, pero así éramos subjetivos e impulsivos.
Y así fuiste entrando a mi vida, no como dicen que entra el amor, rompiendo ventanas y destrozando puertas, tu no lo hiciste así, tu fuiste tocando la puerta y acercándote lento pero de forma segura, fuiste conociendo mis gustos y mis sueños luego lentamente te fui enseñando mis inseguridades, mis miedos y mis debilidades; acepte que fueras parte de mi vida, comencé a amarte de una forma que no conocía, busque todas las excusas para hablarte y di todo para que fueras feliz para verte sonreír, porque tu sonrisa se convirtió en un motivador, para ser mejor persona, para ser mejor mujer, para ser ese alguien que te merecías, pero no todo es como uno quiere, mis miedos y mis debilidades me fueron alejando de ti, entendiste a que me refería con locura, comprendiste que mi locura no es esa locura agradable que te enamora sino que es esa locura que te acaba poco a poco; deje de ser esa mujer perfecta para ti y tu sonrisa ya no era la misma.
Y es así como un día entre lagrimas te dije que lo mejor era que te alejaras de mi, que debías ser feliz y tú con toda la seguridad me diste la razón, pero me conocías bien y sabias que soy muy débil y me dijiste que lo hiciéramos poco a poco, que solo nos escribiéramos cuando lo necesitáramos, pero yo nunca quise que nos necesitáramos yo solo quise que tu quisieras tenerme contigo pero aun así accedí a eso, siempre con ese miedo de que algún día no me ibas a necesitar más y todo se iba a acabar. Y es así, llego ese día que entre lagrimas te volví a escribir, volví a decir que te extrañaba y tu un poco cortante me respondiste con un simple "en serio sigues así" y con mis mejillas llenas de lagrimas comprendí que todo se había acabado, que el volverte a escribir había sido un error que estas enamorado de aquella hermosa mujer a la cual le regalas tus sonrisas; comprendí que el acto de amor más grande que tengo para ti es salir de tu vida y no volver, tan solo rogar que tan solo por un segundo yo no haya sido un "nada" en tu vida.
Lo único que me queda por decirte es que agradezco cada sonrisa, cada palabra de aliento, cada carcajada, agradezco esa historia de amor que me regalaste, con sus locuras, tristezas, discusiones y aquel amor efímero; y sobretodo agradezco que me hayas dado las alegrías que me debía la vida, por eso deseo que seas feliz, espero verte algún día en algún parque dando saltos de alegría, cumpliendo tus sueños y metas y viendo esa sonrisa que aunque no sea para mi siempre será la mejor.